miércoles, 29 de febrero de 2012

- Prométeme que seré la única mujer a la que vas a querer.
- No puedo.
- ¿Por qué? ¿Hay otra?
- No, pero la habrá. Será como tú pero más joven... y te llamará mamá.

lunes, 27 de febrero de 2012

¿Por qué siempre intentamos buscar defectos cuando ni siquiera pueden verse?
O la habitación está muy llena, o yo estoy muy vacía..






martes, 21 de febrero de 2012

Búscate a alguien que te coma con la mirada, que te abrace con tanta fuerza que llegues a quedarte sin respiración, que te bese en todos los semáforos y que después quiera lanzarse contigo bajo las ruedas de un camión... Que te cubra con una manta cuando te quedes dormida y que le tenga envidia al sueño por no dejarle ver quién eres cuando cierras los ojos. 

No busques que te inviten a copas, que te paseen en coche, que te hagan regalos, que te follen medio bien y que te digan cosas bonitas. Eso puede hacerlo cualquiera

viernes, 17 de febrero de 2012

"¿Sabes lo que te pasa? No tienes valor. ¡Tienes miedo! Miedo de enfrentarte contigo misma y decir: Está bien, la vida es una realidad. Las personas se pertenecen las unas a las otras porque es la única forma de conseguir la verdadera felicidad. Tú te consideras un espíritu libre, un ser salvaje y te asusta la idea de que alguien pueda meterte en una jaula. ¡Bueno nena! Ya estás en una jaula. Tú misma la has construido, y en ella seguirás vayas a donde vayas porque no importa a donde huyas, siempre acabarás tropezando contigo misma".

lunes, 6 de febrero de 2012

Ella, capaz de hacerte perder la cabeza, capaz de hacerte comportarte como un auténtico bobo. Ella es la que te ocupa la cabeza todo el día, la que aunque no quieras, siempre está ahí. Sabes que te mueres por tenerla, porque te coma a besos, y también sabes que te encantan sus besos en la nariz, y sus mordisquitos en la oreja. Te encanta enfadarla, y no puedes evitar echarla de menos. Sabes que es su olor el que quieres que forme parte de tu aire, más incluso que el oxígeno. Que por mucho que lo niegues rozar su piel te hace volar, y es que sabes que no hay nadie como ella, sabes que te encantan sus tonterías, y que te pasarías hablando con ella de un lado al otro del mundo. En el fondo sabes que te importa y sabes que tú también a ella, y eso debería hacerte feliz...
Pero sobre todo deberías saber que no tienes que perderla para darte cuenta de que la has encontrado.
¿Sabes? Lo siento... Siento ser tan idiota a veces. 
Siento cada palabra fuera de sitio, cada gesto sin ganas, cada vacío, cada estupidez. Siento no colaborar en algunos "Te quieros", no distinguir entre lo que está bien y lo que es fácil, no saber cuando parar. Siento pagar contigo cosas que no merecen lágrimas y mucho menos las tuyas. Pero que aunque no lo diga todos los días, el caso es que me muero por gritarlo cada puto segundo.
Que a veces no se colaborar en algún "Te quiero" pero no puedo evitar morirme de felicidad por dentro cuando los escucho, que no distingo entre lo que está bien y lo que es fácil porque a ambas llevan tu nombre... 
Que ya sabes de sobra que no se parar.
Y mucho menos de necesitarte.

viernes, 3 de febrero de 2012

¿A quién guardamos espacio cuando dormimos a un lado de la cama?

Son muchas las ocasiones en las que tras un día intenso de trabajo me he metido bajo las sábanas y me he hecho esta pregunta. Dicen que casi todas las preguntas tienen respuesta, sin embargo,  son muchas las ocasiones en que siempre hay un motivo que nos impide alcanzar a esta última, bien sea porque escapa  de nuestro dominio, bien, porque nos negamos a aceptar una respuesta que ya se vislumbra pero no nos satisface. 

En la pregunta que planteo no existe de momento respuesta pero sí un sueño. Cuando cierro los ojos y me invade el cansancio, mi mundo onírico me despierta durmiendo, y en ese preciso instante aparece él. Es tan real que  puedo sentir como si cada rincón de mi cuerpo se estremeciera cuando acaricia mi cintura suavemente. El calor de sus besos me sorprende tras la espalda, a la vez que desliza con delicadeza sus tiernas manos sobre algunos mechones de mi cabello. Los retira hacia atrás de una manera tan sutil que casi me hace cosquillas, entonces, me doy la vuelta y le regalo una sonrisa “forzosamente provocada” como  él dice, pues, no duda en asegurarme que es su juego favorito…hacerme sonreír de cualquier manera y…. a toda costa cada día de su vida. Yo me quedo contemplándolo, siempre me han gustado los surcos  que se dibujan alrededor de su boca, denotando lo feliz que le hace tenerme entre sus brazos…

Sentirle sobre mi cuerpo me hace temblar… pero al mismo tiempo me incita a  no pensar cuando me cruzo con sus ojos y  el deseo irrefrenable por besarle me invade. De pronto lentamente,  con un haz de luz en su mirada ilumina mis retinas aproximándose hasta mis labios, pero antes se detiene en mi oído izquierdo  y me susurra:” Lo único que lamento de esta vida es que sea tan corta y, por contra, mis ganas de amarte no encuentren fin”. Le miro enamorada, con ternura  y le digo  que no tiene que preocuparse  por eso porque cuando estoy con él, el tiempo se detiene, se hace eterno y las manillas del reloj van al ritmo de nuestra respiración cuando nos besamos.

Entonces me besa, le beso, nos besamos. Los besos dan paso a más amor… me da un beso de esquimal sin previo aviso y sentimos que somos los protagonistas de nuestras vidas y los dueños de nuestro amor…

En medio del más absoluto silencio y con la luz de una vela, observo su torso desnudo, me ha cogido entre sus brazos y me estrecha de una forma en la que el frío no tiene cabida alguna y donde el aroma de su perfume en su cuello me hace desearle tanto como el fuego que derrite la vela que nos alumbra … me desnuda poco a poco, deshojando los pétalos de una inocencia revestida de lencería sexy…llegando a la transparencia más invisible la que empieza en el tacto de una piel que solo siente con él y la que termina en el éxtasis de suspiros que se tropiezan con el deseo…una carrera por alcanzar el cielo juntos, de carmín desgastado en unos labios ansiados en cada beso, me aprieta fuertemente a su cintura y me dice :”Te quiero tanto que ahora mismo siento que  soy más tuyo que mío”  y yo le contesto que en él renazco y muero al mismo tiempo, en un placer insaciable cargado de amor. Nuestros cuerpos se funden en una cadena cuyos eslabones encajan perfectamente y mis manos se entrelazan con las suyas….al ritmo de un sentimiento cuyo  clímax encontramos con la sensibilidad  a flor de piel.

Cansados, nos besamos tratando con cada beso de recuperar el aliento perdido  en medio de tanta pasión amorosa. Me acoge entre sus brazos para descansar  mientras dibuja caricias en forma de círculos en mis brazos con la finalidad de relajarme para, después, quedarme profundamente dormida.   Pero antes de eso, se despide con la promesa de volver y me dice con cariño:”Recuerda que en tu cama no hay un hombre pero en tus sueños sí, que nunca te canses de soñar con mi existencia porque existo en la medida en que tú lo deseas, solo los sueños que se desean con fuerza se hacen realidad…no sé tu nombre, ni siquiera dónde vives, sólo sé que me pasa lo mismo que a ti; cada noche me encuentro contigo: cuando duermo se cierran mis ojos pero se abre la puerta que me lleva a ti…Me encanta visitarte y me río de mis amigos cuando me dicen que eso de esperar a la persona adecuada es un atraso… porque sé que envidiarían cada instante nuestro, eres la mujer de mi vida, la que me hace sentir vivo, uno de los sentidos de mi existencia, un motivo y miles de sensaciones bellas  por las que la vida merece la pena ser vivida. Y esto es solo el principio…la magia de levantarme cada día… sintiendo que el lado de mi cama que no ocupo… lo llenas tú con tu presencia ausente pero al mismo tiempo tan presente… salir a  la calle con el presagio mágico y tentador de que en cualquier lugar nos podemos conocer… si no he hablado ya contigo y aún no he me dado cuenta… lo sabré reconocer cuando sienta que eres tú… y pasará una cosa: te diré: es curioso pero tengo la sensación de conocerte de toda la vida y solo han pasado un par de semanas”

En ese preciso instante, le interrumpo y le respondo: yo te contestaré a eso que eres el hombre de mis sueños y entonces  tú…sonreirás.


vía @CarolinaMnzFdez

miércoles, 1 de febrero de 2012

-¿Qué?
-Nada..
-¿Porque me miras así?
-Me gusta mirarte, observarte..contemplarte.admirarte..
-¿Y que tengo yo para merecer tanta atención?
-La sonrisa mas magnética de la tierra
Llega un momento en que en una noche como esta, estoy predispuesta a escribirte. Estoy predispuesta a tener una cena “normal” a tu lado, representa que tengo que portarme bien, y estar en silencio. (Sabes perfectamente que no me gusta estar en silencio). Estoy agusto en silencio, pero contigo no. Tienes tanto que contarme, pero no me miras a los ojos, encima te colocas lejos de mí. Creo que tienes miedo... tranquilo no caerás, somos jóvenes con sentido común, cosa que siempre me has repetido. La botella de vino... no sé para que la habré sacado, total... a ti no te gusta beber, y yo odio el vino. Te miro de reojo, y tú ni te inmutas. Me siento alagada, porque te has arreglado tanto pero también tengo miedo por si piensas que esto es más de lo “normal”. Y en ese momento te pones de pie y te alejas de la mesa que tanto me ha costado decorar. Recorres el pasillo, hasta que te encuentras, y vienes hacia mí seguidamente me contemplas. (Esta vez a los ojos). 

Me miras, te miro. (El tiempo murió)

-Dedícame un baile.

Sus manos rozaban mis fríos hombros, eso encendió un ambiente más voluptuoso. Nunca le había visto así, tan cautivante. Llene un vaso de temores, que estaba predispuesta a tirar al día siguiente. Mi nombre es Nicole, y hoy no sé bailar. Pero te gustaba ver como movía los pies. Te gustaba verme feliz. 
2 horas más tarde, nos vimos envueltos de sonrisas, miradas, y una botella de vino casi terminada.

-Siénteme.

Siempre he sido demasiado susceptible con estas cosas. Siempre me ha impresionado su manera de contemplarme en silencio. Siempre he sentido algo por el, siempre he querido pensar en el sin sentirme mal por hacerlo. Siempre te he sentido, y cuando digo siempre es siempre. Pero ahora es tarde, ya son más de las 12 y tengo otro compromiso, lo siento enserio... pero ha sido un malentendido por parte de los dos.

-Buenas noches, querido. (y el tiempo se puso de pie para otro baile).
-A veces me duele no tener un diálogo definido, y tener que improvisar en momentos catastróficos. Te estoy hablando desde mi propia ignorancia. Me duele querer de esta manera, y por otra parte me duele tener que perder pedacitos, pedacitos realmente importantes. 2 mundos no tan diferentes, y ninguno son seguros. Ninguno es tan seguro para jugarse un destino por aquello. Pero la verdad, me encuentro en un momento, donde la felicidad se centra en una esquina de papel, donde está escrito tu nombre. 2 mundos y una persona. Una persona y dos mundos. Y todo va pasando y pensaba que había olvidado aquella sensación de reír sin control por amor y llorar desesperada por perder el control. ¿Inestabilidad? Posiblemente soy inestable o demasiado bipolar. Descendiente de esas que no paran de rizar el rizo. Y posiblemente también seré descendiente de esas que tienen miedo a todo-cuando digo todo, me refiero al amor- y su miedo se convierte en una agonía constante guardado en un bucle infinito. 
-¿Qué me intentas decir?
-Que creces y brillas. Sé que soy muy poquita cosa, pero soy realmente tuya. Realmente intento centrarme en tu mundo. Un mundo diferente al mío. Totalmente diferente. Adaptarme al ambiente e improvisar un guión definitivo. Pero es demasiada organización para mí, necesitaré tu ayuda. Ya sabes que no se ordenar muchas cosas, no sé si mi corazón te importa, no sé decir que no a la última copa, no sé si quieres dormir conmigo, no sé si quieres que sea tu abrigo, no sé que cojones hacer contigo. Vuelvo a repetir, que hablo desde mi propia ignorancia. Solo sé que te quiero más que nunca.
-Yo también te quiero más que nunca. 
-Entonces todo va viento en popa.